El Rally Dakar ya tiene un nuevo campeón, se llama Nani Roma y, esta vez en coches, repite la hazaña que consiguiera hace diez años a lomos de una KTM. La edición de este año tuvo de todo, etapas durísimas, calor extremo que pasó factura especialmente a los motoristas, la criba de las sanciones por no encontrar los puntos de control, órdenes de equipo, rifirrafes entre pilotos y emoción hasta la última jornada. Sea África o sea Sudamérica, ¿qué más se podía pedir?
Nani Roma supo dominar con autoridad la carrera desde la terrible quinta jornada, marcando suficiente distancia que dosificar en las posteriores etapas con sus más cercanos competidores, incluidos Carlos Sainz, que no llegó a terminar el rally tras sufrir un accidente en un enlace y Stéphane Peterhansel, que fue la piedra en el zapato de Nani hasta cruzar la meta. ¿Alguien esperaba menos del hombre que ha ganado el Dakar en once ocasiones, en categoría de motos y coches?
Por tercer año consecutivo MINI ha vuelto a triunfar en el Rally Dakar. En las últimas jornadas Nani Roma asistió a la reacción de Peterhansel en las dunas, con el francés recortando tiempo hasta el punto en que MINI, el equipo de ambos, tuvo que pronunciarse, pedir prudencia y – con la boca pequeña – recurrir a las órdenes de equipo que facilitasen la victoria de Roma.
Aunque Stéphane Peterhansel ejerció el papel de escudero, el mismo que ejercieron otros pilotos antaño para darle algún que otro Dakar, no pudo evitar la tentación de adelantar a Nani en la general en la etapa de ayer. Un pinchazo y su buen ritmo fueron la excusa perfecta para el galo, que en vísperas de la etapa final se colocaba como líder virtual de este Dakar ante la estupefacción de Roma y el equipo MINI. Con más cordura, pero seguro que también con cierta decepción, Peterhansel dejaba, definitivamente, vía libre a Nani Roma a su primera victoria en coches.
Qué la polémica y las ordenes de equipo han deslucido ligeramente la victoria, no lo dudamos. Personalmente, entiendo estas decisiones, aunque no me gusten. Pero de ahí a menospreciar lo conseguido por Roma, va un trecho, brindándonos un rally-raid casi perfecto.
En motos, Marc Coma ha vuelto a ganar con una superioridad incontestable sobre sus perseguidores, con Jordi Viladoms segundo y Olivier Pain tercero. Tampoco podemos olvidar el recuerdo del motorista Eric Palante y el de dos periodistas que fallecieron durante el transcurso de esta carrera.
Ignacio Casale se adjudicó la victoria en quads. En camiones, Andrey Karginov y Gerard de Rooy se jugaron la victoria al sprint, con tensión incluida para el ruso y campeón de este año, cediendo demasiado tiempo a su rival al quedar bloqueado en los últimos tramos. Finalmente Kamaz y Andrey se alzaban con la victoria.
Fuente:Diariomotor
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